jueves, 13 de mayo de 2010

El encuentro de jordana con su padre:

Jordana debía presentar una ponencia para el congreso que se realizaría en La Universidad de los Andes sobre filosofía y letras. Ella junto a otros colegas lideraban el evento al cual asistirían grandes académicos y filósofos de toda América Latina y Europa.

Jordana estaba feliz, porque había encontrado en este tipo de espacios y eventos la excusa perfecta para hacer lo que le gustaba y de paso lograba relacionarse con gente de todo el mundo a los cuales siempre les entregaba una foto de su padre y les pedía el favor que la ayudaran con su búsqueda. Para ella esto se había convertido en una obsesión y seguiría en la misma dinámica hasta encontrarlo.

Las cosas con Javier marchaban bastante bien, ya no peleaban tanto y él se había unido a la causa de Jordana. Para ella, todo era un poco más llevadero con su apoyo. Él le ayudaba a repartir las fotos y a conversar con la gente, juntos hacían del objetivo algo mucho más cálido. Sin embargo, Jordana estaba totalmente convencida que las cosas no mejorarían del todo con él hasta que ella encontrara a su padre. Este motivo era sobre todo para Javier el que lo motivaba aún más a acompañar a Jordana en este proceso.

El día del congreso llegó y Jordana abriría el evento, ella no solía sentir muchos nervios con este tipo de actividades. Pero ese día los sintió, sentía que las manos le sudaban, la voz se le partía y las piernas le temblaban. Antes de hacer su presentación Jordana le recomendó mucho a Javier el relacionarse muy bien con los invitados internacionales para luego poder establecer una relación con ellos y así lograr repartir las fotos de su padre.

A la entrada del evento las personas ingresaban y se iban inscribiendo en una base de datos, luego recogían el material y eran guiados por una señorita al auditorio donde se realizaba el evento. Mientras los invitados ingresaban, a Javier se le acercó un hombre de unos 70 años, con un acento español. Él le preguntó que cómo hacía para ingresar al evento, que venía de la universidad Complutense de España y que estaba un poco retardado porque según el cronograma él sería el segundo en presentar su ponencia. Mientras el hombre hablaba Javier se encontraba mirando su computador, cuando alzó la cabeza para explicarle al hombre del acento español que debía hacer, se quedó casi paralizado al darse cuenta que se trataba del mismo hombre de la foto de Jordana. No había duda alguna, tenía los mismos ojos de ella y su forma de gesticular era la misma.

Javier se encontraba totalmente emocionado y le preguntó al hombre por su nombre, él le dijo que se llamaba Rodrigo, partiendo de esto Javier le continúo tomando sus datos y de repente le preguntó si tenía hijos. Él le respondió que en algún momento de su vida los tuvo, que por ahora no sabía si los continuaba teniendo. Entonces, Javier le respondió que él estaba seguro que todavía los tenía que si reconocía al hombre que estaba en la foto que sacó de su bolsillo.

Rodrigo sorprendido miró fijamente a Javier y le preguntó por qué el tenía una foto de él. Javier le respondió que si quería saber la respuesta que entrara en el auditorio y escuchara a la joven que estaba abriendo el congreso.

El evento comenzó y Jordana lo abrió citando una frase de Jean Paul Sartre que decía “El hombre nace libre, responsable y sin excusas”. De aquí partió su ponencia la cual se basó en la teoría existencialista de Sartre orientada a la libertad de todo ser humano. El discurso de Jordana fue todo un éxito, cuando terminó todo el mundo la aplaudió. En medio de la multitud Rodrigo se levantó y le dijo a Jordana que el hombre nacía libre pero hay veces las circunstancias de la vida le impedían continuar siéndolo, que sin embargo eso no lo eximia de ser responsable de sus actos y que gracias a Dios este era el momento donde el podía hacerse responsable de sus acciones y quería recordarle que jamás la había olvidado, y que este día era él más especial de su vida porque había podido encontrarse con su pasado pero también con su presente.

Junto a Rodrigo estaba Javier que le sonrió a Jordana, en ese instante ella confirmó que Javier había encontrado a su padre y que de ahí en adelante su vida sería distinta, pues por fin compartiría con los únicos hombres a los que había amado en su vida.

2 comentarios:

  1. ¿finalmente la vas a dejar así? ¿O vas a hacer una versión con los diálogos?

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  2. Si Adri yo ya le saqué diálogo está en HISTORIA FINAL LEIDA EN VOZ ALTA ;) un abracito

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